La Audiencia Nacional de España ha accedido a la extradición de la fugitiva más buscada de República Dominicana, reclamada por las autoridades del país caribeño por matar a su jefe de una puñalada que le propinó durante una discusión en la ferretería donde trabajaba en abril de 2022.
Los magistrados de la Sección Tercera autorizan la entrega de Francelys María Furcal Rodríguez, acusada de un delito de homicidio voluntario, al descartar que el delito haya prescrito y que en caso de ser entregada su vida corra peligro.
De hecho, los magistrados hacen hincapié en que el solo hecho de que ella manifieste temores por su integridad física si es entregada a las autoridades dominicanas "no basta para entender la concurrencia de un motivo para denegar la extradición". Además, su abogado esgrimió que actuó en legítima defensa.
Asimismo, la Sala ha constatado que está reclamada por la supuesta comisión de un delito común, por lo que tras la petición de extradición no hay una motivación espuria. El delito, subraya, no ha prescrito ni concurren circunstancias que determinen la extinción de la responsabilidad. La Audiencia ratifica que no cabe discutir la jurisdicción de las autoridades judiciales dominicanas atendiendo al principio de territorialidad, al haberse cometido los delitos en ese país.
Francelys María Furcal, de 31 años, fue detenida en Madrid el pasado agosto y se encuentra en prisión provisional desde su arresto. La Policía destacó entonces su "extrema habilidad" para esquivar la acción de la Justicia.
De Colombia a Brasil y Francia
Tras huir de República Dominicana, la fugitiva se desplazó a Colombia y Brasil antes de llegar a Francia y, posteriormente, España. Aunque en un principio la investigación la situaba en Barcelona, las pesquisas policiales llevaron a los agentes hasta el madrileño distrito de Tetuán, donde fue finalmente detenida. Se había teñido el pelo de otro color y usaba documentación falsa a nombre de otra persona de identidad colombiana, que habría adquirido en el mercado negro tras desembolsar más de 1.000 dólares.
Furcal adoptaba rigurosas medidas de seguridad para evitar ser detenida. Solo salía del piso en el que vivía por las noches y recogía su cabello con una redecilla para entorpecer su posible identificación por las Fuerzas de Seguridad.
"Debido a la extrema gravedad de los hechos cometidos y a su gran habilidad para evadirse de la justicia, se consideró por las autoridades dominicanas como la fugitiva más buscada del país", señaló la Policía tras su arresto.
En la demanda de extradición consta que testigos presenciales aseguraron que la discusión se inició cuando la mujer pidió a uno de los encargados del negocio que probara unos audífonos. Tras asegurarle que ya habían sido verificados, "se molestó y le lanzó un talonario", que él le devolvió de la misma manera, momento en el que Francelys María Furcal le habría lanzado un objeto, a lo que el hombre respondió "pegándole una patada entre la rodilla y el muslo izquierdo".
Entonces, la reclamada se agachó, buscó el arma blanca y con ella le asestó una puñalada en el abdomen, de la que falleció minutos después en el hospital donde fue ingresado. La mujer se dio a la fuga tras la agresión.