República De la Verdad.- El huracán Laura llegó a tierra en el suroeste del estado norteamericano de Luisiana a las 01:00, hora local de hoy, convertido en un potente fenómeno de categoría cuatro.
Con vientos sostenidos de 240 kilómetros por hora, el meteoro tocó tierra por un punto cercano a la comunidad de Cameron, Luisiana, a unos 48 kilómetros de la frontera con el territorio de Texas, de acuerdo con información del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos, con sede en Miami, Florida.
Decenas de miles de residentes de la zona están sin servicio de electricidad mientras gran parte de los edificios y viviendas de las áreas donde impactó el fenómeno sufrieron daños severos.
De acuerdo con el NHC, continúan las ‘marejadas ciclónicas catastróficas, vientos extremos e inundaciones repentinas sobre sectores de Luisiana’, y se esperan inundaciones repentinas en todo el suroeste de dicha demarcación.
Horas antes las autoridades pidieron a los residentes que evacuaran las zonas costeras, pero no todos los residentes tenían los medios hacerlo, de acuerdo con medios locales, lo que presagia un número considerable de víctimas, sobre lo cual aún no hay reportes oficiales.
Fotos que aparecieron en las primeras horas del día en las redes sociales mostraron destrucciones en las ventanas de numerosos edificios.
En los últimos días, el meteoro tuvo una trayectoria que, entre otras islas, incluyó a Puerto Rico, República Dominicana y Haití.
Laura tocó suelo cubano el domingo como tormenta tropical, por la provincia de Santiago de Cuba, para luego avanzar por los mares del sur de ese país, y abandonar el territorio en la noche del lunes, rumbo al golfo de México.
El área afectada por Laura fue devastada por el paso del huracán Rita en septiembre de 2005, con daños que sobrepasaron los 11 mil 300 millones de dólares.
Dicho fenómeno meteorológico provocó también un centenar de muertos, miles de heridos y una colosal afectación a edificios y áreas residenciales.
En agosto de ese mismo año impactó Luisiana el huracán Katrina, uno de los más destructivos, que golpeó el territorio como categoría cinco a finales de agosto de 2005 y ocasionó más de mil 830 muertes, ante la falta de previsión y de medidas de contingencia por parte de las autoridades locales y federales.
Fuente: Prensa Latina.